El Centro de Transferencia de Cargas, iniciativa de Fadeeac recogida por el gobierno de la ciudad, ayudará a descongestionar el tránsito pesado en la arterias de la Capital

Las obras en el Centro de Transferencia de Cargas (CTC), en Villa Soldati, avanzan a paso firme y para noviembre se prevé finalizar con la primera etapa (20 héctares, de las 37 de predio), y la ocupación y las actividades comenzarán en los primeros meses del próximo año.

«Con el CTC se busca ordenar el tránsito y concentrar en un predio la actividad logística que se realiza en los barrios del sur, por lo cual se evita el uso del espacio público para actividades de carga y descarga de mercaderías. Esto benefiará a los vecinos, pero también permitirá a las empresas del transporte y la logística trabajar en mejores condiciones. A la vez se favorece el crecimiento de la zona sur de la ciudad, como el Distrito tecnólogico de Parque Patricios o el de las Artes, en la Boca», explicó Ignacio Werner, asesor del Ministerio de Desarrollo Económico del gobierno de la ciudad de Buenos Aires.

El centro surgió por iniciativa del sector del transporte y la lógistica, impulsada por la federación Argentina de Entidades Empresarías del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) y recogida por el gobierno porteño. La ley para la creación y el funcionamiento del centro fue aprobada por amplio consenso en la Legislatura, y luego del llamado a licitación se adjudicó la concesión por 30 años a CTC Administradora, sociedad integrada por accionistas que provienen del transporte y la logística.

En la primera etapa se realizarán cuatro naves, cada una tiene 28 módulos de 900 metros cuadrados cada uno, entre superficie cubierta y playas de maniobras. A los 112 módulos proyectados para una segunda etapa.

Infraestructura

El predio cuenta con redes de agua, electricidad, fibra óptica, telefonía, desagües, sistemas contra incendios, grupos electrógenos, sistemas de seguridad con circuitos de cámaras, pasarelas en alturas para la circulación de peatones y calles internas, entre otros.

Está previsto un sector para talleres mecánicos, estación de servicio, estacionamientos, locales de venta de neumáticos, repuestos, y de alquiler de autoelevadores y otros equipos. En el predio también se instalarán oficinas, cafeterías, restaurantes, minimercados, farmaias, cajeros automáticos. El centro estará abierto las 24 horas, todos los días del año.

«Con el Centro de transferencia de Cargas se contribuye a reducir el congestionamiento de tránsito generado por la circulación de camiones en la ciudad, y a la vez se aportan soluciones a las empresas del transporte y la logística que podrán centralizar las operaciones de cross-docking en un predio», dijo Hugo Membrive de CTC Administradora.

Al predio llegarán camiones desde distintos puntos del país y las mercaderías pasarán a utilitarios y otros vehículos de menor porte que serán los que realizarán la distribución en la ciudad y el interior. A la inversa, distintos vehículos de menor porte llegarán al centro de transferencias y pasarán la carga a camiones para su traslado, explicaron en la sociedad. Se estima que por el predio circularán unos 5000 vehículos por día.

Financiamiento

La inversión que demandó esta primera etapa es de unos $700 millones, y en el financiamiento intervinieron el Banco Ciudad y otras entidades bancarias.

Para mejorar la circulación de vehículos, Autopistas Urbanas (AUSA) construye un distribuidor de tránsito a la altura del peaje Dellepiane, que conecta las autopistas Cámpora, 25 de Mayo y Perito Moreno.

Pero además, dijo Werner, el próximo año se construirá otro distribuidor que permitirá la conexión directa entre el centro de transferencia y la autopista Cámpora. Uno de los puntos de la concesión establece que CTC Administradora deberá construir una escuela y un centro de salud en la zona sur.

«En este proyecto trabajan en conjunto el sector público y privado, y el resultado beneficia a todos, incluyendo a los vecinos de la ciudad: en un terreno baldío estará funcionando un centro que permitirá mejorar el tránsito, pero también la seguridad en la zona, al tiempo que se crean empleos en los barrios del sur», concluyó Werner.

Fuente: LA NACIÓN