Líneas de crédito en dólares
La salida del cepo era una condición reclamada por los bancos extranjeros para ingresar fondos y el arregló con los holdouts, la segunda; Banco Supervielle lanzó una oferta parte del 6% anual
Los exportadores y proveedores de los exportadores podrán contar con la posibilidad de acceder a una línea de crédito en dólares, a un plazo de entre 180 días u hasta 4 años, y una tasa que oscilará entre el 6 y el 8,5% anual.
«Estamos haciendo una oferta a toda la cartera de clientes, básicamente empresas medianas y pequeñas pero también grandes, que apunta a financiarse en dólares en plazos desde 180 días hasta 4 años. Apuntamos a dar una opción de financiamiento para las empresas que tienen una generación de divisas donde lo más natural es que calcen la financiación que van a tomar con los recursos que van a recibir, es decir, que calcen las dos monedas y sobre todo en un ambiente como el que tenemos hoy donde las tasas en pesos tienen una dinámica propia de la situación del mercado monetario actual y sobre todo de la inflación, y donde claramente las tasas en dólares para este tipo de financiaciones una vez que ya pasó la devaluación y se espera que el dólar flote con más libertad son mucho más logicas y razonables», destacó en diálogo con LA NACIÓN Milton Migotti, gerente de Negocios Internacionales de Banco Supervielle, entidad que avanzó en punta en este tipo de productos para el comercio exterior.
Consultado sobre las condiciones del crédito, Migotti confirmó tasas «del 6 al 8,5% en 180 días y hasta cuatro años de plazo» para operaciones con exportadores o con proveedores de exportadores o con proveedores de exportadores» Estamos hablando con un organismo multilateral para conseguir una línea un poco más larga. La realidad es que esto lo estamos haciendo hoy con los recursos propios del banco. Esperamos en los próximos meses tener líneas que vayan quizás hasta los 7 u 8 años de plazo agregó.
«Creemos que desde el punto de vista de los clientes es mucho más logico hoy endeudarse en dólares que en pesos», explicó el ejecutivo, sobre todo debido al «nivel de tasa de interés y por la expectativa de que el dólar flote libremente: después de una devaluación importante no debería haber sobresaltos por lo menos en el corto plazo. Y es mucho más natural atar la financiación a la moneda en que facturás», indicó.
Asimismo, señalo que las tasas en pesos responden a la dinámica dela situación monetaria y de la inflación. «Entonces lo que estamos haciendo es una apuesta para apoyar a las empresas que generan divisas y que lo primero que necesitan en un contexto como el actual, donde hay una evidente mejora en las condiciones para exportar, es cómo financio ese capital de trabajo necesario para exportar, para encarar un proyecto de inversión o comprar una máquina para mejorar el proceso productivo», señaló Migotti.
Fondeo
Respecto de la posibilidad de que una entidad financiera del exterior confirme una línea de crédito en dólares en el país, el directivo indicó que existen dos posibilidades: «O bien fondeamos esa operación con depósitos en dólares que tenemos en el banco en Argentina o con patrimonio del banco (y para el plazo de hasta cuato años lo hacemos de esa forma), o bien lo hacemos líneas de bancos del exterior que pudimos mantener en la época del cepo», manifestó.
Y con relación a si el levantamiento del cepo implicó un mayor interés para financiar el país, Migotti destacó que el interés en el exterior aumentó mucho. «Habitualmente viajamos dos o tres veces por año a distintas ferias de bancos en el mundo y la verdad que hay mucho interés de los bancos con los que habíamos seguido trabajando pero además de bancos nuevos que hacia muchos años que trabajaban con la Argentina y sobre fin del año pasado estaban interesados en empezar a hablar nuevamente. Creo que a mediano plazo todos los bancos en general tendrán líneas del exterior de este tipo», proyectó.
Por último, en relación con el acuerdo con los holdouts como condicionante para la llegada de dólares al país, el ejecutivo de Supervielle señaló que el cepo era el primer tema por solucionar, y la segunda cuestión era precisamente «el arreglo con los holdouts para liberar mayores plazos y para tener costos más competitivos».
«Hoy tenemos costos parecidos a lo que era durante el cepo, estan en caída pero lo que me está faltando del exterior es que me liberen un plazo más razonable», puntualizó.
Fuente: LA NACIÓN